El Último Honk de un Ford Mondeo: Un Adiós a Todo Volumen

image
El Último Honk de un Ford Mondeo: Un Adiós a Todo Volumen - Imagen con fines ilustrativos únicamente
23/05/2025topgear

Un Auto Querido

El Ford Mondeo azul de 2006 de Kidderminster, conocido cariñosamente como Alan, dejó de tocar el claxon el pasado viernes por la noche, rodeado de amigos cercanos. Este Mondeo LX 2.0 TDI, con 147,000 millas de aventuras, siempre se distinguió por su uso peculiar del claxon.

Alan (el dueño):
- Recordaba cómo Alan (el auto) no paraba de utilizar el claxon para agradecer a otros conductores.
- Usaba el claxon para advertir a los niños al cruzar la calle.
- Murmuraba bromas a los ciclistas, incluso provocando algunos sustos.

Un Amor Inquebrantable por el Claxon

El humano, Alan, quien ha disfrutado de este auto por casi diez años, estima que Alan (el auto) emitió más de un cuarto de millón de toques de claxon llenos de personalidad en las carreteras británicas.

Recuerdos de Alan (humano):
- El claxon de Alan podía expresar gratitud, amor o melancolía.
- El sonido final de Alan fue un enérgico y sereno parpadeo, como un adiós aceptado.

Reflexiones Finales

Rumores sobre una posible reactivación del claxon en Alan fueron desechados por la mecánica Paula Spannering, quien considera que rehacer el claxon sería un acto irrespetuoso con la esencia del auto.

Opiniones de Paula Spannering:
- Un auto sin claxon es como un elefante sin trompa.
- Un claxon es el alma del coche, su esencia, su chi.

Como recordatorio, el claxon es obligatorio según la Regla 112 del Código de Circulación.

  

En resumen, Alan, el Mondeo, no solo fue un auto, sino una personalidad vibrante en las carreteras. Su último honk fue un adiós resonante, recordándonos la importancia del claxon en la identidad de un coche.

Lo que dicen otros...

Todavía no hay comentarios