- Nissan ha colaborado durante más de 20 años con fabricantes chinos, especialmente Dongfeng.
- Espinosa está abierto a integrar marcas chinas en el ecosistema de producción de Nissan fuera de China.
- Este movimiento permitiría a las marcas chinas evitar los aranceles de la UE impuestos recientemente.
Tras seis semanas como CEO, Espinosa enfrenta decisiones difíciles luego del fracaso de las conversaciones de fusión con Honda. Nissan ha decidido cerrar siete plantas y recortar hasta 20,000 empleos.
A pesar del panorama complicado, la situación no es tan crítica como en 1999. “En aquel entonces había una enorme deuda y nada de efectivo”, recordó Espinosa. Actualmente, Nissan dispone de más de ¥2.2 billones más líneas de crédito no utilizadas.
Nissan debe manejar asuntos como el funcionamiento de su planta en Sunderland, Reino Unido. Espinosa mencionó que los costos energéticos son un problema, y sugirió que podría necesitarse apoyo del gobierno británico para continuar operando.
Resumen: Nissan enfrenta retos financieros, pero su CEO Iván Espinosa no busca depender de otros socios. Con colaboración abierta hacia China y decisiones internas difíciles, la compañía mantiene su independencia con fondos disponibles y busca soluciones para desafíos operativos, como los altos costos energéticos en el Reino Unido.