El corazón de esta obra maestra es tu elección entre dos motores de cuatro cilindros naturalmente aspirados:
- 2.0 litros: 225 CV y 178 lb-pie
- 2.5 litros: 290 CV y 243 lb-pie
Ambas opciones están acopladas a una transmisión manual de cinco velocidades y alcanzan una velocidad máxima limitada de 155 mph. La aceleración de 0 a 100 km/h varía entre 4.8 y 4.1 segundos, lo que demuestra que incluso la versión "lenta" es todo menos eso. Además, con un peso en seco de solo 815 kg, el manejo es tan ágil que provocará sonrisas al volante.
Tim Fenna, fundador e ingeniero jefe de Frontline, comenta: “El MGA es uno de los deportivos británicos más bellos jamás fabricados. Sin embargo, siempre tuvo un potencial sin explotar debido a su motor y componentes obsoletos. Nuestro objetivo era renovar el diseño para que su rendimiento esté a la altura de su imagen".
El exterior mantiene su esencia, salvo por los nuevos faros LED y algunas insignias adicionales. Para quienes deseen un toque personal, Frontline ofrece opciones como capós con louvres, pantallas de perspex e incluso una caja de almacenamiento para picnic.
El interior recibe mucha más atención: materiales de primera calidad, asientos personalizables en cuero o Alcántara, y soporte lumbar ajustable. Las revisiones incluyen nuevos diales, indicadores y una radio avanzada con conexión Bluetooth, garantizando que escuchar a tu artista favorito sea pan comido.
La producción de la 'Factory Edition' comenzará pronto en las instalaciones de Frontline en Oxfordshire y estará disponible en versiones roadster y coupé, tanto con volante a la izquierda como a la derecha. El costo base se rumorea en alrededor de £120,000, sin incluir el coche donante, con entregas previstas para el verano de 2026.
Resumen: El 'Factory Edition' de Frontline reimagina el MGA, combinando la estética clásica con un rendimiento moderno excepcional, motores potentes y un interior de lujo. Con prestaciones que igualan su belleza, es una obra que llevará al MGA a nuevas alturas de popularidad y deseabilidad.
